Viajar en coche nos proporciona infinidad de ventajas aunque también tiene sus inconvenientes, especialmente si viajamos con niños, porque pueden marearse y acabar el día con un buen trabajo de limpieza de vómito en el coche, por ello es importante saber qué es lo que debemos tener en cuenta para que esto no suceda.
Es muy importante tener presente que el vómito es orgánico, por tanto tiende a descomponerse y producir malos olores y ser un foco de bacterias si no se limpia rápido. Además hay que evitar que profundice en la tapicería porque incluso podría quedar dañada debido a los ácidos del estómago.
¿Cómo hacer que no se mareen?
En los niños, la sensibilidad al mareo aumenta hasta los 12 años, momento en el que comienza a bajar, haciendo que los viajes sean más normales y haya menos riesgo de mareos. Aún así es muy aconsejable que los pequeños mantengan siempre la vista fijándose en algo muy lejano. Las cosas que están muy cerca o los cables del tendido eléctrico pasan muy rápido y pueden producir sudores fríos, mareos, nauseas y vómitos.
No es recomendable que vayan leyendo, jugando a videojuegos, escribiendo, etc., dado que cuando dejan de tener la vista fijada en un mismo punto después de mucho rato y levantan la vista, la adaptación al entorno en movimiento es un cambio brusco nada recomendable.
Es importante que el niño o la niña no hayan comido en exceso ni tampoco que estén en ayunas, con una comida ligera es suficiente, siempre que no se hagan muchos kilómetros, para lo que entonces será necesario hacer paradas cada dos horas aproximadamente.
Con el sueño no aparecen los mareos, por lo que si a la hora de viajar se coincide con horas nocturnas o la hora a la que el niño o niña suelan dormir la siesta, el viaje será mucho más placentero, tanto para ellos como para sus padres.
Viajar en coche nos proporciona infinidad de ventajas aunque también tiene sus inconvenientes, especialmente si viajamos con niños, porque pueden marearse y acabar el día con un buen trabajo de limpieza de vómito en el coche, por ello es importante saber qué es lo que debemos tener en cuenta para que esto no suceda.
Es muy importante tener presente que el vómito es orgánico, por tanto tiende a descomponerse y producir malos olores y ser un foco de bacterias si no se limpia rápido. Además hay que evitar que profundice en la tapicería porque incluso podría quedar dañada debido a los ácidos del estómago.
¿Cómo hacer que no se mareen?
En los niños, la sensibilidad al mareo aumenta hasta los 12 años, momento en el que comienza a bajar, haciendo que los viajes sean más normales y haya menos riesgo de mareos. Aún así es muy aconsejable que los pequeños mantengan siempre la vista fijándose en algo muy lejano. Las cosas que están muy cerca o los cables del tendido eléctrico pasan muy rápido y pueden producir sudores fríos, mareos, nauseas y vómitos.
No es recomendable que vayan leyendo, jugando a videojuegos, escribiendo, etc., dado que cuando dejan de tener la vista fijada en un mismo punto después de mucho rato y levantan la vista, la adaptación al entorno en movimiento es un cambio brusco nada recomendable.
Es importante que el niño o la niña no hayan comido en exceso ni tampoco que estén en ayunas, con una comida ligera es suficiente, siempre que no se hagan muchos kilómetros, para lo que entonces será necesario hacer paradas cada dos horas aproximadamente.
Con el sueño no aparecen los mareos, por lo que si a la hora de viajar se coincide con horas nocturnas o la hora a la que el niño o niña suelan dormir la siesta, el viaje será mucho más placentero, tanto para ellos como para sus padres.