La pregunta que todos nos hacemos cuando compramos un vehículo nuevo es: ¿cómo lavarlo para no estropear la carrocería? Pues bien, el detailing o lavado del coche a mano es la forma más segura y efectiva si lo haces bien. Por ello, te mostramos detalladamente cómo lavar el coche para no rayarlo. ¡No te lo pierdas!
Pasos para limpiar
el coche sin rayarlo
En la actualidad, son muchos los
talleres especializados en detailing, incluso hay máquinas para lavar automóviles
en tu propio domicilio con este tipo de limpieza tan exhaustivo. No obstante,
también puedes hacerlo tú mismo, pero tendrás que utilizar productos adecuados
y tener tiempo disponible.
Antes de nada, ten en cuenta que siempre será más fácil lavar sobre limpio. En cambio,
si dejas que la suciedad se acumule no solo te costará más retirarla, sino que
las superficies acabarán dañándose. Por lo tanto, la pintura de la carrocería
podría verse afectada. Estos son los pasos para limpiar un coche a mano sin rayarlo
y obtener unos resultados notables:
- Lavado. Necesitarás un
cepillo, un guante y una bayeta. El cepillo es
para limpiar las llantas, por lo que debe ser específico para ello.
Comienza mojando el vehículo con abundante agua. Después, llena un cubo con
agua y un jabón especial para lavar coches y otro solo con agua para
enjuagar el guante, así no mezclarás la suciedad con el agua limpia.
Comienza por el techo realizando movimientos de arriba hacia abajo, y
hazlo siguiendo este orden: techo, ventanillas, capó y todo lo demás.
- Aclarado. Aclara el coche con
bastante agua, a baja presión y de arriba
hacia abajo. Si tardas demasiado en limpiar el coche y el jabón se va
secando en algunas zonas, mejor aclararlas antes de que se sequen por
completo. Pon especial atención en las rejillas y
conexiones entre piezas, evitando que aparezcan chorretones
inesperados más tarde.
- Secado. Si no secas el coche
después de enjuagarlo se verán las
marcas de las gotitas en la carrocería y en las lunas. Para ello, lo mejor
es utilizar una toalla o una bayeta de microfibra para no arañar la pintura.
Extiende la bayeta y deslízala por la superficie comenzando por el techo.
Después, sigue el mismo orden que para enjabonar y no dejes ninguna zona
sin secar.
La pregunta que todos nos hacemos cuando compramos un vehículo nuevo es: ¿cómo lavarlo para no estropear la carrocería? Pues bien, el detailing o lavado del coche a mano es la forma más segura y efectiva si lo haces bien. Por ello, te mostramos detalladamente cómo lavar el coche para no rayarlo. ¡No te lo pierdas!
Pasos para limpiar
el coche sin rayarlo
En la actualidad, son muchos los
talleres especializados en detailing, incluso hay máquinas para lavar automóviles
en tu propio domicilio con este tipo de limpieza tan exhaustivo. No obstante,
también puedes hacerlo tú mismo, pero tendrás que utilizar productos adecuados
y tener tiempo disponible.
Antes de nada, ten en cuenta que siempre será más fácil lavar sobre limpio. En cambio,
si dejas que la suciedad se acumule no solo te costará más retirarla, sino que
las superficies acabarán dañándose. Por lo tanto, la pintura de la carrocería
podría verse afectada. Estos son los pasos para limpiar un coche a mano sin rayarlo
y obtener unos resultados notables:
- Lavado. Necesitarás un
cepillo, un guante y una bayeta. El cepillo es
para limpiar las llantas, por lo que debe ser específico para ello.
Comienza mojando el vehículo con abundante agua. Después, llena un cubo con
agua y un jabón especial para lavar coches y otro solo con agua para
enjuagar el guante, así no mezclarás la suciedad con el agua limpia.
Comienza por el techo realizando movimientos de arriba hacia abajo, y
hazlo siguiendo este orden: techo, ventanillas, capó y todo lo demás.
- Aclarado. Aclara el coche con
bastante agua, a baja presión y de arriba
hacia abajo. Si tardas demasiado en limpiar el coche y el jabón se va
secando en algunas zonas, mejor aclararlas antes de que se sequen por
completo. Pon especial atención en las rejillas y
conexiones entre piezas, evitando que aparezcan chorretones
inesperados más tarde.
- Secado. Si no secas el coche
después de enjuagarlo se verán las
marcas de las gotitas en la carrocería y en las lunas. Para ello, lo mejor
es utilizar una toalla o una bayeta de microfibra para no arañar la pintura.
Extiende la bayeta y deslízala por la superficie comenzando por el techo.
Después, sigue el mismo orden que para enjabonar y no dejes ninguna zona
sin secar.