Dentro del apartado de la limpieza interior de coches que todos los propietarios debemos tener con nuestro vehículo, se encuentran los olores, algo que puede resultar muy desagradable a la hora de conducir o simplemente por entrar en el coche. Uno de los olores más desagradables que puede haber es el del tabaco, el cual es bastante difícil de quitar dado que se mete por los textiles y por el tejido del techo entre otros lugares.
Si se va a fumar en el coche, podemos decir que nuestros consejos no te servirán de nada dado que el olor estará siempre presente. Además, cuanto más se tarde en eliminar, más penetrará el olor y será más complicado retirar.
Debemos vaciar el cenicero y limpiarlo en profundidad. Para ello, podemos dejarlo remojando en agua caliente y poner un producto de limpieza básico para poder eliminar al máximo la suciedad y el olor incrustado.
El siguiente paso es realizar un aspirado en profundidad en el suelo y la tapicería con lo que eliminaremos cualquier resto de ceniza que pudiera haber. El siguiente paso es preparar una solución con agua y bicarbonato o vinagre para limpiar la tapicería. Si no se tiene, también se puede adquirir un producto específico para la limpieza de la tapicería.
Humedeceremos un paño con esta solución o producto y haremos varias pasadas sobre la tapicería y con otro paño haremos lo mismo, pero por la zona del salpicadero, frotando bien en ambas partes para eliminar el olor. A pesar de ello, es una operación que hay que repetir en varias ocasiones dado que el olor no es nada fácil de quitar, sobre todo si lleva demasiado tiempo. Además, no hay que olvidarse de ventilar el coche siempre que sea posible.