Al igual que nos preocupamos por la limpieza del interior de coches o por tener un exterior siempre con el mejor aspecto posible, durante el invierno hay un aspecto muy importante que no debemos dejar de tener presente y que no está relacionado con la estética y limpieza de nuestro vehículo sino con la conducción.
Cuando llega la temporada de frío las condiciones climatológicas cambian radicalmente y hay que prestar especial atención a la carretera para no tener ninguna clase de contratiempo. Por ello queremos compartir contigo algunos tips para que puedas conducir con la máxima seguridad.
Respetar al máximo las indicaciones de máximo de velocidad es primordial, especialmente en aquellos días en los que no haya una buena visibilidad, bien sea provocada por la lluvia, niebla o nieve por ejemplo.
Además no hay que olvidarse de respetar siempre la distancia de seguridad respecto al coche que nos precede en la carretera, estar atento a sus señales y advertir a los conductores que nos siguen de nuestras maniobras en todo momento.
Antes de emprender una salida en coche, especialmente si se van a hacer muchos kilómetros, hay que revisar los líquidos del coche, si hay suficiente combustible y el perfecto funcionamiento de sistema eléctrico del vehículo.
Hay que asegurarse también de que contamos con todo lo necesario para poder afrontar las condiciones invernales, como por ejemplo contar con cadenas, aunque hoy en día se pueden utilizar neumáticos de invierno y no necesitar usar las cadenas.
No debemos realizar cambios de carril de manera brusca o haciendo volantazos, siempre debe ser suave y previamente señalizando nuestro cambio de carril con los intermitentes, asegurándonos de que no viene nadie o que el conductor que nos sigue está a mucha distancia.
Para finalizar, no podemos olvidarnos de que en momentos con poca visibilidad es recomendable llevar la iluminación correcta en el coche, lo que favorecerá nuestra visión y también ser vistos por otros conductores.