¿Cambio automático o manual? Esa es una de las preguntas que se hacen muchas personas que tienen pensado adquirir un coche. Para algunas personas puede parecer algo que no revierte mucha importancia porque por fuera son iguales, el interior también, la limpieza en el interior de coches es la misma… lo único que cambia es el motor, pero ¿qué marca la diferencia entre unos y otros? Puede que la seguridad
Aunque en Europa predominan los coches con cambio manual, cada vez son más personas las que apuestan por el automático, no solo por su gran comodidad sino por la seguridad que ofrecen esta clase de vehículos.
Según un estudio llevado a cabo en Japón, los conductores de coches de cambio manual sufren más estrés a la hora de conducir porque deben estar a todo momento a acelerar, frenar y a cambiar de marchas.
En cambio, con un coche automático lo único que hay que hacer es poner la palanca en D y acelerar o frenar según se requiera, o en caso de los motores con cambio secuencial, dar un pequeño toque a la palanca, así de sencillo.
Los conductores de coches automáticos suelen ir mucho más relajados a la hora de conducir, teniendo una frecuencia cardíaca menor. Con esta relajación es normal que se concentren más en la carretera, aumentando las posibilidades de un accidente en comparación con un conductor de coche con cambio manual.
También hay que recordar que un coche automático tiene más efectividad en momentos de hora punta donde el tráfico es muy denso, dado que aportan mucho confort en esos momentos que pueden ser una auténtica pesadilla.
A pesar de ello, estos coches suelen contar con los mismos sistemas de seguridad que vienen implementados en los que tienen caja de cambios manual, por lo quela seguridad radica a partir de la comodidad que se tiene al conducir.